BARRANCO DE RÍO VERDE (OTÍVAR-GRANADA)
¡Vuelta a las andadas!
Y nunca mejor dicho. Los Amigos de la Playa Nudista de Cantarriján retomamos éste mes, nuestras rutas senderistas al desnudo. Con la seguridad que siempre nos ha caracterizado y que tan necesaria es en ésta época de pandemia, el Domingo 6 de Junio, iniciamos una nueva caminata que nos llevó hasta Río Verde, un paseo entre bosques de pinares, escarpadas paredes de roca caliza y pozas de un mágico color esmeralda. La erosión por el constante paso del agua, durante miles de años, ha creado saltos, cañones, cascadas y estanques de colores increíbles que hacen tan especial a este lugar.
Con una exuberante vegetación y un paisaje que parece sacado de Los Pirineos, Andalucía esconde increíbles secretos en lugares insospechados. Y el Río Verde, a las afueras de la localidad granadina de Otívar, es uno de ellos.
El Barranco de Río Verde forma parte del Parque Natural Sierra de Tejeda, Almijara y Alhama, cuyas cumbres hacen de frontera natural entre las provincias de Granada y Málaga. Un paisaje declarado de Interés Cultural por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico.
La idea era realizar esta ruta combinando el senderismo con los chapuzones. Bastó un calzado adecuado para caminar por tierra y que se pudiera mojar. El recorrido se realizó a través de una pequeña senda que se internaba en el Parque Natural. Un descenso hasta el mismo cauce del río, con unas aguas perfectas para refrescarse cuando más apretó el calor.
Comenzamos la ruta a eso de las 9:30h, en el punto de encuentro que se estableció por el guía del grupo, nuestro socio Enrique Rodríguez de Geokeda Granada, justo en el desvío del kilómetro 33 de la conocida en la zona como carretera de la Cabra para reorganizar los coches y quedarnos sólo con con los más altos y bajar por una pista de tierra hasta el inicio de la ruta.
Durante las aproximadamente 5 horas que duró la ruta, visitamos la cascada de los palos fosilizados, la cueva, algunas de las impresionantes pozas de agua que encontramos en la parte inicial del río y para finalizar, el embalse de Funes.
Pero no todo el tiempo fue empleado en «rutear». De esas 5 horas de sendero, más de 2 se emplearon en disfrutar de fantásticos baños en las pozas y en el embalse, con parada para comer y retomar fuerzas antes de emprender el camino de regreso.
Mira AQUÍ el recorrido de la Ruta.
Durante nuestra caminata al natural, nos encontramos con algunas personas que también habían elegido esa jornada para realizar su ruta: Un grupo de barranquismo, una familia que pasaba su día en el campo y dos parejas de origen británico. Fuera de la sorpresa y el asombro ocasionados por encontrarse a un nutrido grupo de personas desnudas, decir que las reacciones también fueron naturales para con nosotros.
No hace falta más que ver las fotografías para ver que pasamos un inmejorable día, gracias a tod@s l@s compañer@s que participaron y compartieron nuestra pasión común por el senderismo y por el nudismo, formando un grupo fantástico y con un buen rollo increíble.
¡Únete a nuestra próxima caminata nudista y que no te lo cuenten!