“NIDO”, O CÓMO EL ANTI NUDISMO LLEGÓ A UNA PLAYA NUDISTA

“NIDO”, O CÓMO EL ANTI NUDISMO LLEGÓ A UNA PLAYA NUDISTA

El pasado 22 de Julio de 2021, un trasiego de personas comenzaba a llegar a los alrededores de Arroyo de Enmedio y Arroyo Vaquero, la playa nudista más antigua y conocida de España al estar amparada por la pionera urbanización naturista de Costa Natura (Estepona – Málaga).

Se inauguraba en la zona un nuevo local: “NIDO ESTEPONA”, un chiringuito que, en un gran evento nocturno, atrajo a más de 450 engalanados invitados a su fiesta de arranque. El lujo y el glamour llegaban a la playa nudista.

Meses atrás, ya empezaban a escucharse algunas voces discordantes y desconfiadas sobre lo que éste nuevo local atraería al entorno de la primera aldea naturista del país.

Y es que toda tormenta que se precie, comienza con un pequeño chispeo…

En los primeros días de apertura de “Nido”, un turista extranjero, asiduo de la playa, decidió alquilar una de sus hamacas en la arena.

El hombre comenzó a tender su toalla, se desnudó completamente y se preparó para pasar un estupendo día de sol y baños de mar.

Rápidamente, llegó el responsable y le advirtió que debía de vestirse o marcharse, ya que ni en las hamacas ni en ninguna de sus instalaciones, estaba permitido hacer nudismo.

Este fue el arranque de una historia que ya muchos decían saber que “no iba a ir bien” desde que comenzaron a verter el primer hormigón de la obra. Y tanto es así que algunos vecinos, propietarios en Costa Natura, ya la denunciaron previamente ante Costas por (supuestamente) ser una construcción ilegal de cemento.

Pero volvamos un poco atrás, para poner en antecedentes históricos a aquellos pocos que aún no hayan oído hablar ni de Costa Natura ni de nada de esto.

COSTA NATURA, PARAÍSO NUDISTA

En los primeros años de la década de los setenta, algunos grupos españoles, establecieron contacto con las organizaciones europeas y concibieron la idea de crear asociaciones regionales en nuestro país.

A pesar de la prohibición legal, con el fin del régimen franquista se iniciaron las gestiones para conseguir la legalización. Se sucedieron entonces los escritos, las gestiones oficiales, las reuniones y las correspondientes pegas burocráticas. Al fin se pudo convencer, a la Administración, de la no peligrosidad social del naturismo, después de casi tres años de gestiones continuadas. La Asociación Naturista de Andalucía se creó en febrero de 1977 y en mayo de 1978 pudo celebrar su primera asamblea general en la legalidad.

En Noviembre de 1979, cuando gran parte del litoral malagueño era todo campo, comenzaron las obras de lo que luego sería Costa Natura, el primer complejo naturista español.

En un terreno que ocupaba unas ocho hectáreas, iría una urbanización de más de seiscientas viviendas tipo bungalow (finalmente se hicieron unas 200) y con servicios y comodidades de todo tipo. El proyecto de Costa Natura se desarrolló en cuatro fases, y su terminación tuvo lugar en el año 1983.

No hay que olvidar que los naturistas españoles de aquella época, sólo contaban con el camping almeriense de “Las Palmeras” para estar desnudos. Un camping que reunía todos los requisitos exigibles a este tipo de instalaciones, aunque no disponía de playa naturista.

Pero Costa Natura si que tendría playa. Concretamente una franja de, aproximadamente, cuatrocientos metros de longitud. Y así quedó reflejado en las resoluciones que por Decreto Civil se establecieron tras la peticion de la Asociación ANA, la primigenia asociación naturista de Andalucía, realizada por Branco Bruckner, su primer Presidente y también uno de los fundadores de la FEN (Federación Española de Naturismo).

Tanto la urbanización como el margen litoral naturista de Estepona estarían reservados a los socios de la Asociación Naturista de Andalucía, aunque luego se amplió a todos los miembros a la Federación Española de Naturismo y a la Federación Naturista Internacional.

Finalmente, su acceso no se limitó a asociados federados y cualquier nudista podría hacer uso de la playa fuera o no residente de la urbanización.

El resto de la historia ya la sabemos. Arroyo Vaquero se convirtió, con el paso de los años, en la playa nudista más conocida dentro y fuera de nuestro país.

Un entorno que se ha revalorizado mucho con el paso del tiempo.

La convivencia siempre ha sido ejemplar entre los diferentes vecinos que han ido llegando a este lugar, adaptándose al nudismo en la playa y respetando las normas de espacio. Pero la llegada de éste lujoso local ha hecho ver que el equilibrio y la armonia existente era más frágil de lo que se pensaba.

Nido ha desafiado toda la tradición naturista de ésta playa y los usuarios de Costa Natura no están dispuestos a que esto suceda.

EL “CHIRINGUITO” DE LA DISCORDIA

“Nido Estepona” es un beach club (lo de chiringo igual les parece a algunos muy poco glamouroso) que pertenece al grupo MOSH. Ésta compañía, MOSH, se fundó en Marbella en el año 2015, primero con la apertura del “Mosh Fun Kitchen”, al que seguirían “Playa Padre” en 2017, “Momento” en 2018, “Motel Particulier” en 2019 y ahora, “Nido” en 2021. Su intención es la de crear espacios originales alejados de los típicos chiringuitos o merenderos malagueños y del concepto tradicional de la restauración, el ocio y la diversión. Realizan también eventos y fiestas privadas a precios de oro.

El interior lo dice todo. Lujosas camas por la que cobran como si te acostaras en madera de ébano y un par de zonas de piscina. Una de ellas con bar interior que simula la entrada a una pequeña playa con orilla incluida.

Es por eso que su público es, mayoritariamente, de gran poderío económico. O al menos ellos así lo promocionan: Turistas de Kuwait, Arabia Saudí, Qtar, Rusia…y para cualquiera que quiera y pueda pagar, por ejemplo, 9€ por una cerveza de marca corriente, 23€ por un sandwich de pavo, huevo y queso o entre 30€ y 200€ por alquilar sus hamacas. Además de cobrar adicionalmente un generoso plus por el servicio prestado, claro.

De hecho, siempre parece que haya más trabajadores que clientes allí. Varias encargadas que dan muchas vueltas con sus carpetas y bloc de notas, camarer@s de mesa y de barra, socorristas, etc…Todo el personal siempre de punta en blanco (parecen sacados de revistas de moda) Además, claro, de mucha seguridad cargada de músculos y rostros desafiantes. Según declaraciones de Nido, unos 80 empleados aproximadamente.

Pero, ¿qué está haciendo éste tipo de local en la playa de Costa Natura? Básicamente, aprovechar el filón del nivel adquisitivo que ha revalorizado el entorno con la reciente construcción de 70 viviendas de lujo edificadas casi a pie de playa y anexadas a la urbanización naturista. El precio más bajo del apartamento más “sencillo” ronda los 600.000€ y el más caro alcanza los 2.500.000 de euros. Promocionan la zona entre los clientes de varias cadenas hoteleras de “luxury” de la Costa del Sol y tienen servicio de recogida, tanto por tierra como de los que vienen por mar (desde yates sobre todo).

Se dice que la calidad de la comida ofertada, y siempre según las críticas aportadas por clientes en importantes portales turísticos como Tripadvisor o Google reseñas (nosotros no hemos tenido ocasión de probar nada de la carta), no se corresponde con el precio de la misma. Sólo hace falta entrar a leer algunas y se verá que es muy complicado encontrar buenas opiniones.

En contra de lo que algunos nos aseguraron, sobre que Nido permanecería abierto 10 meses al año, el local ya ha comunicado su “cierre de temporada” para antes de iniciarse el mes octubre, sin anunciar aún una fecha de reapertura.

LAS PRESUNTAS IRREGULARIDADES

Son innumerables las quejas de haber tomado como propia una parte de la senda litoral pública, un paseo marítimo que han privatizado y llenado de fina arena blanca, cual playa ibicenca. Los usuarios de la zona dicen que aquel paseo era antes vía de paso y que ahora ya forma parte de su terreno.

Nosotros no conocemos el límite de la propiedad, pero hicimos la prueba. Hay unas escaleras por las que se accede desde la playa hasta la mencionada zona de impoluta arena. Nos pusimos de ropa lo primero que pillamos y, nada más subir, aparece como salido de la nada alguien del personal preguntando que deseabamos y si veníamos de la playa. Así de pronto, daba la impresión que no eramos muy bienvenidos allí. Nuestras prendas no eran de Gucci ni de Dior (nosotros usamos los pareos de nuestro querido Lio, vendedor cantarrijano de toda la vida)… No recuerdo que fue lo que contestamos, pero después de una mirada de arriba a abajo, nos respondió que allí no había de eso por lo que preguntabamos. Así que nos fuímos por donde habíamos venido.

Para ellos, el ir desnudo es impropio de determinadas familias y nocivo para los niñ@s, que “no tienen porqué ver cuerpos desnudos” (declaración real y publicada en El País). Ellos, como digo, tal vez necesitan mirar la marca de la ropa para saber si eres apto para su carta de precios. Al ir desnud@s no hay nivel adquisitivo que presuponer, claro.

Y no es algo que pensemos nosotros, es que ya lo dicen ellos solitos: “Aquí viene gente económicamente muy potente, futbolistas, artistas, magistrados…eso es bueno para Estepona. Antes aquí no había nada, pero las cosas cambian, es ley de vida”- dicho por Albert Beniflah (máximo responsable de Nido).

Es otra de las muchas ventajas de ser nudistas, que al relacionarte en desnudez con otras personas, al hablar con otr@s igual de desnudas que tú, eliminas el que tu mente tenga que ir pensando y adjudicando, de manera casi automatizada, etiquetas sociales en los demás.

Cuando hablas con alguien vestido, muchas veces no puedes evitar (por el desaprendizaje social en el que tod@s hemos sido “mal educados”) el ir creándote una idea de la otra persona por su estilo al vestir, si usa marcas caras o no…. y eso ya te hace suponer cosas que quizás no sean ciertas o a actuar de una manera determinada.

Pero sigamos con las irregularidades. En otra parte de la senda pública y junto al arroyo, los del “Nido” han instalado un enorme y estruendoso generador eléctrico tapado con cañizos. Éste generador está denunciado por estar en plena vía de paso público. Desde el Ayuntamiento ya se les ha instado a quitarlo de ahí. Pero hasta ayer mismo, al menos, seguía funcionando ruidosamente en la misma ubicación.

El Ayuntamiento de Estepona les ha otorgado una concesión de espacio público en la playa para la instalación de lujosas hamacas y sombrillas caribeñas. De dicha concesión, de 300 metros de espacio, habían ocupado mucho más del estipulado. También fueron denunciados por esto y, de momento, han tenido que retirar esas hamacas de más que las hacían llegar hasta casi la misma orilla del mar (podéis verlo en la foto a pie de texto).

Todo lo que era denunciable se ha puesto en conocimiento del Ayuntamiento. De igual manera, todas las quejas se les han hecho llegar por varias vías, incluso la política (la portavoz del grupo socialista en la oposición, realizó una rueda de prensa a pie de playa), pero el gobierno no parece estar muy por la labor ante las reivindicaciones de los nudistas.

No queremos ser mal pensados ni prejuzgar a nadie, pero la noche de la inauguración del local se dejaron ver muchos políticos del consistorio esteponero, y muchas caras conocidas de la flor y nata nocturna marbellí. No hay nada malo en eso. Los políticos inauguran todo tipo de cosas, pero si que nos choca ésta aparente “preferencia” en la atención posterior.

De hecho, nuevamente su responsable, Albert Beniflah, ha asegurado que posee mensajes de apoyo de personas importantes del Ayuntamiento en su teléfono (manifestado ante un medio de comunicación).

Desde el consistorio esteponero, indican que si Nido cree que sus clientes deben ir con bañador en las hamacas hay que respetarlo, como también deben hacerlo desde el establecimiento con los nudistas, puesto que la playa es pública. “Tendrán que convivir de forma pacífica”, se dice desde el Ayuntamiento. Afirman, además, que el edificio está construido en una zona de equipamiento municipal, como también añaden que originalmente se había previsto que el naturismo floreciera frente a Costa Natura cuando este era un proyecto mucho más amplio que incluía casi mil apartamentos, pero que finalmente se quedó en mucho menos de lo proyectado.

¿Sigue existiendo ese apoyo municipal que en numerosas ocasiones (la última hace solo un año, en 2020 cuando reconoció la aportación única de Costa Natura al desarrollo turístico de Estepona), ha hecho gala de contribuir al “auge” de la ciudad como destino para el turismo?.

¿O es que acaso desde Estepona se pretende “recalificar” turísticamente ésta zona como nuevo emplazamiento de alto standing en detrimento de una histórica playa nudista como ésta?

Ahora las playas en España son libres y de uso público no restringido, si (excepto alguna normativa antinudista decretada por ciertos Ayuntamientos), pero Costa Natura fue la primera playa “oficial” en España, fruto del trabajo y la constancia de las asociaciones de por aquel entonces, nacidas de la nueva libertad democrática que nos otorgó la Constitución Española del 1978.

ACTIVISMO NUDISTA EN COSTA NATURA

Varias acciones se han llevado a cabo al respecto de ésta “remada a contracorriente” del nudismo. Bien por los nudistas que frecuentan la playa y por la propia urbanización de Costa Natura o bien por algunas de las asociaciones naturistas que operamos en España.

Almudena Medrano, es una de las personas que residen en la urbanización y es la principal artífice de haber abierto una petición en change.org para que “se respete el carácter nudista de la playa” después de haber tenido algunos “encontronazos desagradables” con personal de “Nido”.

Ya sabéis lo que opinamos nosotros de Change.org, que salvo para que te bombardeen con publicidad al introducir tu email, carece de cualquier validez legal que aporte soluciones. Pero es indiscutible que mediáticamente es muy efectivo.

Almudena también pide una “señalización” que indique que esa es una playa de uso nudista, de simple carácter informativo. No para excluir a nadie y si para evitar malentendidos. Pero el Ayuntamiento no está por la labor.

De hecho ya existía una cartelería anterior, pero hace un par de años y después de un temporal, el cartel fue destruido y nunca más se repuso. La única forma que tienen ahora de informar del carácter nudista de la playa es llevando una bici con un cartel de papel pegado a ella.

También Peter Bryceson, actual presidente de la urbanización naturista, ha hecho declaraciones en algún medio de comunicación explicando que lo que se pretende es preservar la playa “sin más conflictos ni comportamientos intimidatorios por parte de Nido o sus invitados”. Bryceson fue uno de los primeros en denunciar que las hamacas del chiringuito ocupaban más espacio del que tenían estipulado en la concesión, así como la presencia de un generador y el almacenaje de su combustible en la senda litoral.

Como ya hemos explicado más arriba, las hamacas se retiraron pero el generador aún sigue allí.

Desde Costa Natura también se ha pedido, como ya solicitó Almudena Medrano, que se reinstalaran los carteles donde se informaba sobre el uso naturista de esta playa, pero los técnicos municipales ya realizaron el pasado mes de marzo un informe sobre la delimitación concreta. El texto concluía que “no existía un documento municipal que detallara sus fronteras ni que otorgara a esa playa la condición de naturista porque “se tornaba innecesario y vacío de contenido”. “Mostrarse desnudo en la playa constituye un ejercicio del desarrollo de la personalidad en esta o cualquier otra”, se decía en las conclusiones.

Finalmente, el pasado sábado 18 de Septiembre, la Asociación Nudista Naturista de Andalucía (ANNA) convocó una concentración en la playa para dar respaldo a los nudistas de ésta mítica playa y al propio enclave naturista en si, dirigiendo su petición tanto a todas las asociaciones nudistas como a aquellas personas que quisieran mostrar su apoyo a las peticiones y quejas de los usuarios de Costa Natura.

Desde nuestra Asociación de Amigos de la playa Nudista de Cantarriján (AAPNC) acudimos a la llamada y estuvimos presentes quince de nuestros socios y miembros de la directiva.

No había que hacer mucho más que ir a pasar el día desnudo a la playa y eso fue lo que hicimos, instalándonos pacíficamente delante del terreno acotado de hamacas, con nuestros carteles y las sombrillas de ambas asociaciones.

Pero parece que el responsable de Nido no vio bien que estuviéramos así delante de ellos y llamó a la policía municipal de Estepona. Llegaron tres coches y siete agentes del orden.

Después de hablar con denunciantes y denunciados, la policía vio que sólo éramos personas normales y corrientes que veníamos a disfrutar de la playa nudista. A nosotros nos dijeron que si nos grababan, increpaban o mostraban algún tipo de hostilidad, que rápidamente les llamáramos. A ellos les dijeron que “ese grupo de nudistas que les molestaba” solo estaban haciendo uso de zonas públicas del arenal y que si eso les incomodaba, quizás habían ubicado el chiringuito en el lugar equivocado.

El resto de la jornada transcurrió con normalidad y disfrutamos muchísimo de ésta preciosa playa nudista, que estuvo todo el día llena de bañistas. Muchos se acercaban a nosotros a preguntar, a darnos las gracias y a interesarse por nuestras asociaciones.

Venían a explicarnos cosas que no sabíamos entonces. Como que por parte de algunos clientes sobre todo, se grababa a los nudistas y que otros llegaban a insultar y a reirse. Que incluso “alguien” les arrojó pequeñas piedras desde arriba…

Como digo, eso fue lo que nos contaron. A nosotros, desde luego, nada de esto nos pasó aquel día.

FUTURO INCIERTO

No podemos predecir como acabará esto. No sabemos si habrá entente o si se volverán a reencontrar la armonía y la convivencia que siempre han caracterizado a ésta playa. Pero por el momento, hemos comprobado que va a ser difícil de lograr.

Tampoco sabemos si hay realmente, como muchos insinuan, intereses puestos sobre la mesa para “reconvertir” o acotar aún más el espacio nudista del arenal.

Eso si. Alguien nos contó durante nuestra visita que, posiblemente, existan otros ambiciosos planes de futuro si Nido llega finalmente a funcionar bien.

Planes que pasarían por la construcción de un embarcadero en la playa, al estilo de su vecina “Doncella Beach”, también en Estepona. Brindando aún más exclusividad al posibilitar la oferta de servicios de restauración directa a las embarcaciones recreativas que atraquen en él.

¿Especulaciones y habladurías? Sólo el tiempo lo dirá…

UNA ÚLTIMA REFLEXIÓN

Ésta es quizás una de las entradas más extensas que hemos hecho en nuestro blog, pero el tema bien se lo merecía. Creímos que era importante condensar toda la información que teníamos hasta ahora en un sólo lugar e intentar explicar bien todo en su conjunto. Para entender, sobre todo, que éste no es un problema únicamente basado en poder estar o no desnudos en una hamaca. Eso es casi lo de menos. ¿Quién quiere pelear por gastarse 30€ en usar una tumbona en su playa nudista de siempre? No, no podemos centrarlo todo en eso.

El principal problema es como, cada vez más, nos estamos encontrando actuaciones contra nuestra libertad de expresión y contra la filosofía naturista en los propios espacios que gozan de una larga trayectoria de nudismo. Como decimos en el título de ésta entrada, el antinudismo está llegando a las playas nudistas y no lo estamos queriendo ver.

¿Pasaría lo mismo si un chiringuito nudista se instalara en una playa donde no existe una previa tradición naturista? ¿Que ocurriría si los responsables del local no permitieran la entrada a personas vestidas?

Para empezar, el revuelo social sería mucho mayor. Y seguramente, éste proceder no se entendería y se criticaría hasta la saciedad.

Entonces, ¿por qué no se mediatiza ni se actúa en la postura contraria?. Y tal y cómo se sugiere desde la FEN, ¿por qué no se condiciona legalmente que, ante una concesión o una licencia de apertura en cualquier playa nudista, se pueda hacer un uso sin ropa de sus instalaciones?

Nosotros creemos que una legislación como la que tenemos en España, que no prohibe el nudismo ni lo excluye en ninguna playa, es buena y necesaria. Pero muchos nudistas nos aseguran que ésta misma legislación tan ventajosa, conlleva una desventaja principal por la que se están perdiendo cada vez más playas tradicionalmente nudistas.

Nuestro sentido del respeto, nos impide acudir a desnudarnos en lugares en los que la gente no se desnuda y donde no existe éste hábito. Algo que no obstaculiza que cada vez más personas vestidas acudan a playas nudistas o incluso que establezcan negocios que excluyen el nudismo en ellos. “Nido” es un ejemplo. Pero también ha ocurrido éste mismo verano con el chiringuito “Red Rock” de Illa Roja, en Begur (Girona). Exactamente el mismo caso.

Y además, utilizan en nuestra contra los argumentos que incluso la Federación Española de Naturismo usa en defensa de la libertad de uso de todas nuestras playas: Todas las playas en España son públicas, por lo que no se puede limitar su uso por ningún tipo de discriminación, ni siquiera por llevar o no ropa.

Y en esto mismo, se basan para ubicar establecimientos no nudistas en espacios donde la desnudez ha primado desde siempre para, a su vez, excluir a la propia desnudez. Todo un sinsentido.

Mientras que, no sólo no nacen nuevas playas de uso nudista sino que cada vez desaparecen más, los naturistas nos estamos encontrando con un enorme retroceso social y cada vez con menos opciones.

¿Que podemos hacer ante esto? Pues únicamente defender estos espacios nosotros mismos, poniendo en funcionamiento nuestro activismo.

Y no hablamos únicamente del trabajo que podamos desarrollar desde las asociaciones, sino de lo que todos podemos hacer individualmente.

De nada nos sirve quejarnos del poco nudismo de tal o cual playa si nos limitamos a verlo venir desde nuestra cómoda hamaca o nuestra toalla. Porque es muy fácil actuar “de boquilla”, esperando a que alguien solucione los problemas por nosotros. Pero sin el aporte efectivo que podamos ofrecer cada uno, al final no tendremos más remedio que darle la razón a la madre de Boabdil, en ésta adaptación libre de su famosa frase durante la Toma de Granada:

“Llora como textil lo que no supiste defender como nudista”.

Hoy más que nunca es necesario IMPLICARSE por el Nudismo: Acudir a las llamadas para defender espacios, participar de las distintas actividades y acciones programadas por las asociaciones, no dejar de ir a tu playa nudista por mas textilismo que veas…¡crear nudismo con tu ejemplo y transmitir su normalidad a los demás!.

Si sólo nos quejamos y no actuamos, “Nido”, “Red Rock” y otros más que vengan después, ya habrán ganado la batalla. Y todo por nuestra inacción personal.

De ti depende el final de ésta historia.

Fuentes: El País, Cadena Ser, El Español, La Opinión de Málaga, Antena3, CCMA, MNcomunicacion

2 comentarios

  1. David A

    Es una pena enorme ver ese retroceso social, como bien sentencias. Las playas naturistas son un oasis de la superficialidad que nos invade en esta era. Socializar con alguien desnudo, no es simplemente la hablar con alguien sin ropa, es conectar con la esencia, sus ideas, sus valores y sus sentimientos de la forma más humilde.
    No vamos a darnos por vencidos sin antes luchar, es nuestro momento, y tenemos que acudir a a la llamada.
    Mi más enorme enhorabuena al autor de esta publicación, que con buenas fuentes y buena dicción consiguió retratar la situación real del naturismo en España.

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